El cuidado
de la salud a través de aplicaciones y dispositivos médicos es un área que
atrae cada vez más interés de los inversores, las farmacéuticas y los
hospitales.
Javier
Colás, médico ingeniero y presidente de la compañía de medicina digital Additum
Blockchain, explica cómo pueden aportar valor estas aplicaciones y el
importante rol del blockchain para transformar la industria de la salud.
Recientemente,
Clara Campàs, managing partner de Asabys Partners, asegurabaque el cuidado de
los pacientes a través de dispositivos médicos estaba cobrando fuerza a medida
que las compañías muestran interés por expandirse más allá de la atención
tradicional basada en medicamentos.
Los últimos
movimientos en la industria le dan la razón. El gigante farmacéutico Pfizer
acaba de cerrar un acuerdo, cuyo valor se calcula en torno a los 8 millones de
dólares (7 millones de euros), con la startup Sidekick, que ofrece una
aplicación que anima a las personas a adoptar hábitos más saludables, como
comer bien, dormir lo suficiente y hacer ejercicio, y tomar sus medicamentos
cuando se supone que deben hacerlo.
Es lo que
se conoce como mHealth —la práctica de la medicina o la salud pública apoyada
en dispositivos móviles, inalámbricos, de monitorización o asistentes
digitales— y cada vez se está convirtiendo en un área de interés mayor para
farmacéuticas, hospitales e inversores por su potencial de reducir costes y
optimizar procesos.
Al fin y al
cabo, no es más que la idea de que "es más barato prevenir que
curar", asegura Javier Colás, médico ingeniero y presidente de la compañía
de medicina digital Additum Blockchain.
Sin
embargo, Colás advierte de que crear una aplicación no es suficiente. El
experto ha sido jurado en muchos concursos de startups y asegura que un
problema recurrente que ha detectado es que muchas veces la idea en la que se
basa el proyecto no tiene aplicación en el mercado porque no responde a una
necesidad real del sistema sanitario.
Por eso cree
que se requieren tener a clínicos que analicen todo el proceso y estén
dispuestos a optimizarlo.
Pero, sobre
todo, Colás destaca el potencial del blockchain y la inteligencia artificial
para crear lo que considera necesario para acelerar la innovación en salud: una
plataforma abierta que se encargue de gestionar todas las intervenciones que se
hacen sobre el paciente en todo el proceso.
Una plataforma que conecte el hospital con la
casa del paciente y permita seleccionar qué startups aportan valor
"Con
plataforma abierta sabremos qué piezas faltan para optimizar el proceso",
señala Colás. "Muchas de esas piezas serán aplicaciones", advierte.
"De
esta forma, cuando una startup intente resolver un problema, podrá conectarse y
sabrá cómo debe atacar ese problema concreto dentro del proceso general de
seguimiento de este paciente", señala.
Colás
destaca dos ejemplos en los que está trabajando Additum, que colabora con el
hospital Vall d'Hebron de Barcelona en la implementación de estas tecnologías.
La compañía de medicina digital utiliza la tecnología para trabajar sobre dos
enfermedades crónicas muy caras: el ictus secundario y la insuficiencia renal.
"El
ictus secundario el de una persona que ya ha tenido un ictus, por lo que es
fácil identificar al paciente y poder centrarse en su tratamiento",
explica Colás.
Una persona
que ya ha sufrido tiene un 30% de posibilidades de volver a sufrir otro si no
adopta determinados hábitos de vida, señala. "Entonces, lo que hacemos con
la tecnología es organizadamente, es decir, conectados con la asistencia
primaria y conectados con la unidad de ictus, conectamos a este paciente en su
casa y estamos gestionando su enfermedad en su hogar, dentro de un proceso que
está perfectamente trazado y que funciona sobre una determinada plataforma
sobre la que funcionan distintas aplicaciones", concluye.
En la
insuficiencia renal, el experto señala que se plantea la misma estrategia para
evitar que el paciente desemboque en diálisis. Una de las cosas que debe cuidar
un paciente de este tipo es la sal en la dieta. Sin embargo, Colás señala la
lentitud del proceso: "Los pacientes van al nefrólogo cada tres meses, el
médico ve su analítica y le dice si tiene que comer con más o menos sal".
Se requiere
de una aplicación en casa que, nada más comer, pueda hacer algo tan sencillo
como advertir al paciente de si ha tomado demasiada sal. "Esas son las
aplicaciones que, cuando están insertas en un proceso, funcionan",
reivindica Colás.
"Ahora
mismo falta ese instrumento: falta hacer el análisis del proceso y falta una
infraestructura", lamenta. Sin embargo, asegura que la tecnología
necesaria para construir las plataformas ya existe.
"Nosotros
hacemos la plataforma sobre blockchain e inteligencia artificial que permite
hacer todas estas cosas y permite además que sea una plataforma abierta para
que cada vez que nos falte una aplicación podamos salir al mercado y ver qué
startups es capaz de resolver el problema", explica.
"Blockchain
es una herramienta fantástica para poder gestionar información heterogénea que
viene de distintas organizaciones y poder alinearlas", concluye.
FUENTE Business Insider