De eso se
trata un ecosistema de salud conectada, una red donde las interacciones más
inteligentes, rápidas y precisas entre personas, dispositivos, datos, análisis
y aplicaciones están transformando la forma en que se brinda la atención
médica.
Un
ecosistema de salud conectada implica conectar a los médicos con los datos,
conectar a los pacientes con los proveedores de atención médica y conectar las
prácticas a las redes, todo con el objetivo de brindar mejores resultados de
atención y salud más integrados. Entonces, a medida que el sector se vuelve más
interconectado, una red de comunicación inteligente e intercambio de
información con la intención de mejorar los resultados del paciente, está
transformando la forma en que se brinda la atención médica.
Si bien un
ecosistema de salud conectada se basa en décadas de experiencia específica en
atención médica con soluciones de salud móvil y telesalud, está impulsado por
un Internet de las Cosas (IoT) en rápida evolución que conecta sensores,
dispositivos, software y redes inteligentes a través de Internet.
¿Cuál es el impacto potencial?
Algunos
consideran que la industria de la salud, conocida por su lenta adopción de
información, sufrirá un cambio dramático rápidamente. Sin embargo, potentes
controladores y habilitadores están convergiendo en formas que indican que un
punto de inflexión está realmente en el horizonte.
- La
atención médica es una prioridad en la mayoría de las agendas del gobierno
nacional: existe un consenso cada vez mayor en los gobiernos respecto a la
urgencia de mover la aguja sobre desafíos de salud, acceso y calidad
aparentemente imposibles de acceder.
- Envejecimiento
de las poblaciones y enfermedades crónicas: dos factores determinantes son el
envejecimiento de las poblaciones y la alta incidencia de enfermedades
crónicas, que consumen una cantidad desproporcionada de recursos de salud.
¿Cómo pueden las organizaciones prepararse para
un ecosistema de salud conectada?
- Demasiados
datos, muy poca información: a medida que la atención médica se interconecta
más con la creciente adopción de telesalud, salud móvil y tecnologías
habilitadoras de IoT a sensores digitales, los desafíos de datos deben
abordarse para cumplir la promesa de la salud conectada: llevar datos de
pacientes de todos los servicios de salud a las personas adecuadas en el
momento adecuado.
- Falta de
integración e interoperabilidad: la interoperabilidad se define como "la
medida en que los sistemas y dispositivos pueden intercambiar datos e
interpretar esos datos compartidos”. Para que dos sistemas sean interoperables,
deben poder intercambiar datos y luego presentarlos. La falta de
interoperabilidad entre dispositivos y sistemas existe ya sea porque estos
siguen siendo sistemas cerrados y/o porque contienen datos no estandarizados.
- Seguridad
primera, última y siempre: las herramientas de ciberseguridad y las
protecciones de privacidad deben incorporarse al construir la infraestructura
digital. La arquitectura de seguridad debe abarcar la gobernanza de datos y los
requisitos de seguridad entre usuarios, aplicaciones y dispositivos, y ver cómo
se administrará la autenticación y la validación.
- Un nuevo
mundo de tecnología: las asociaciones hombre-máquina están cambiando la forma
en que compartimos información médica, tratamos enfermedades y descubrimos
nuevas terapias con mayor precisión. Recientes encuestas a los líderes
empresariales de la salud, revelaron una visión dividida del futuro, pero un
acuerdo sobre la necesidad de transformar y cómo llegar allí. El 60% de los
líderes empresariales de atención médica informan que sus organizaciones luchan
por mantenerse al día. Pero todos acordaron la necesidad de transformación y
son optimistas de que pueden proporcionar una infraestructura esencial para
lograr sus objetivos comerciales digitales en los próximos cinco años. Los
datos son enormemente positivos e indican que la industria está preparada para
avanzar ya que el 89% de las organizaciones esperan completar su transición a
un negocio definido por software con el 80% utilizando inteligencia artificial
(IA) para evitar las demandas de los pacientes.
Para
concluir, el mercado de la salud está a punto de saltar, pero hay un paso
crítico que debe ocurrir antes de que la transformación digital se pueda
realizar por completo. Lograr una verdadera transformación requiere que las
organizaciones de atención médica crucen la brecha digital: la brecha entre
conectar la transformación de TI (modernizar la infraestructura) con la
transformación del negocio (ser eficiente en el análisis y digitalización de
las operaciones).
FUENTE: Perfil