La Organización Panamericana de la
Salud (OPS), en uno de sus documentos informativos sobre la pandemia, ha
destacado la importancia de contar con sistemas de información y de aprovechar
las TIC en el primer nivel de atención de los servicios de salud, porque
facilitan la evaluación, el diagnóstico y el tratamiento de los casos
sospechosos y positivos, y porque pueden mejorar su costo y efectividad, sin
detener su operación regular.
La OPS considera que las plataformas
de teleconsulta, de monitoreo remoto de pacientes y comunicación a distancia, y
la utilización de recetas electrónicas, pueden facilitar la asistencia médica y
el seguimiento de las personas que padecen no solamente COVID-19, también otras
enfermedades, o bien, para adultos mayores o para quien presenta alguna
discapacidad.
En estos tiempos, la eSalud puede
contribuir a desarrollar servicios más eficientes y equitativos, pues como la
define la Organización Mundial de la Salud (OMS) -ámbito en el que ha trabajado
desde 2005-, se trata de hacer un uso rentable y seguro de las TIC en apoyo de
los campos de la salud, incluidos los servicios para su atención, su
vigilancia, la literatura científica y educación del personal, el conocimiento
y la investigación.
En el proyecto “Conversaciones sobre
eSalud” de la OPS, se plantea que este concepto busca conformar un ecosistema
completo donde interactúen los diferentes actores de la salud: pacientes,
médicos, enfermeros, transportistas, farmacéuticos, tecnólogos, técnicos,
administradores, asistentes, y otros, junto con las tecnologías, organizaciones
con y sin fines de lucro, proveedores, universidades, políticas, estándares y
normas legales de los distintos niveles de la asistencia sanitaria.
Se ha hablado también de
telemedicina, término de la década de 1970, que implica la prestación de
servicios de atención médica a distancia, a través de las TIC, ya sea por
teléfono, video o e-mail, para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades y
lesiones, investigación y evaluación, así como para la educación continua de
profesionales de la salud.
El Informe “La eSalud en la región
de las Américas” de la OMS reveló que en 2016, las prácticas implementadas en
este ámbito en esta zona aún son dispares, por dar unos datos, 73.9% usan redes
sociales en salud y 57.9% emplean salud móvil y monitorean pacientes a
distancia. Si bien el 77.8% de los países muestra señaló tener una política o
estrategia nacional para una cobertura universal de salud, solo el 61.1%
disponía de una política o estrategia de eSalud.
Sin salud no podemos vivir
plenamente, por eso su protección es parte de los Objetivos de Desarrollo
Sostenible, y entre sus metas está garantizar el mayor acceso a los servicios.
Decía Hipócrates que “sanar es una
cuestión de tiempo, pero a veces también es cuestión de oportunidad”, la cual
puede ser brindada si exploramos las posibilidades que ofrece una política pública
de eSalud para eficientar recursos, acortar distancias y ampliar el alcance,
encontrando la forma de superar los desafíos de su adopción para el beneficio
colectivo.
FUENTE 24 Horas México