Desde sus orígenes humildes, que por ejemplo miden la presión arterial y la temperatura de los pacientes, los sensores han aumentado su sofisticación, permitiendo su uso en una amplia gama de aplicaciones.

Los sensores miden presión, burbujas de aire, flujo de aire, respiración, niveles de glucosa, fuerza, frecuencia cardíaca, humedad y posición, entre otras variables, y se pueden combinar en módulos multisensor. Están siendo miniaturizados, son cada vez más digitales y están disponibles en opciones de bajo consumo o incluso sin energía, con la capacidad de autogenerarse.

También están disponibles en una variedad de formas que se adaptan a aplicaciones específicas, como equipos respiratorios, herramientas de intervención, dispositivos portátiles y dispositivos implantados. Todas estas innovaciones, con la mayor flexibilidad y capacidades que proporcionan, han permitido su uso en un número creciente de aplicaciones de consumo y de grado comercial. No es de extrañar que el mercado de sensores médicos esté programado para llegar a u$s 1.700 millones para 2025, según un informe reciente de Markets and Markets.

En casa

Del lado del consumidor, los sensores están transformando la atención médica en el hogar. Los dispositivos portátiles y los medicamentos etiquetados con sensores permiten a los proveedores monitorear de manera remota las condiciones de salud y el cumplimiento de los pacientes, recibir alertas automáticas y brindar soporte específico a través de la telemedicina. Los pacientes están más capacitados y motivados para aumentar su estado físico, tomar mejores decisiones de salud y controlar afecciones crónicas utilizando información en tiempo real que refuerza su adhesión a los regímenes de medicamentos y otros protocolos de atención médica.

Como ejemplo, alguien con diabetes ahora puede usar su bomba de insulina en su cinturón como un teléfono celular, recibiendo microinyecciones continuas para estabilizar su condición médica. Con la atención médica domiciliaria basada en sensores, los proveedores pueden obtener mejores resultados, reducir costos y evitar costosos reingresos hospitalarios debido a la falta de adherencia del paciente.

Configuraciones de cuidado

En el aspecto comercial, los sensores se utilizan en imágenes, diagnósticos, radiología con intervención y cirugías. Los sensores de imagen ayudan a proporcionar radiografías de alta resolución, tomografías computarizadas y más para diagnósticos. Los sensores de diagnóstico de temperatura y presión pueden proporcionar actualizaciones en tiempo real sobre afecciones vitales, lo que ayuda a centrar la atención y evitar las infecciones asociadas al hospital. Cuando se combina con otras fuentes de datos (estado del equipo, demografía de la población, prevalencia de la enfermedad y otros para potenciar el análisis de big data), los datos del sensor pueden ayudar a informar los planes de tratamiento para pacientes con enfermedades similares o la población en general.

En el frente intervencionista, los sensores están transformando dispositivos médicos en dispositivos inteligentes. Las empresas están desarrollando hojas de ruta de tecnología a largo plazo para aumentar las capacidades de los sensores y crear una cartera más amplia de productos. La experiencia en sensores obtenida en otras industrias y aplicaciones, incluidos los conocimientos de ingeniería, las mejores prácticas y los nuevos materiales, está acelerando la innovación en las industrias de la salud y poniendo nuevas herramientas poderosas en manos de los cirujanos para hacer que la cirugía sea más precisa. Para tomar prestado un ejemplo del mercado automotriz, es como pasar de vehículos convencionales a autos totalmente autónomos guiados por sistemas altamente inteligentes que pueden ingerir y procesar torrentes de datos y hacer ajustes en microsegundos.

Una mirada al futuro

Ese futuro ya está al alcance. Con la capacidad de colocar sensores en catéteres de menos de un milímetro de diámetro, los médicos pueden llegar a nuevas áreas de la anatomía y recopilar datos en tiempo real durante un procedimiento. Considere estas innovaciones recientes:

- Plataformas de conexión de catéteres compatibles con diferentes dispositivos médicos para cirugías mínimamente invasivas. Estos catéteres de bajo perfil y controlados por sensores capturan datos vitales del paciente en tiempo real a medida que navegan por todo el cuerpo humano.

- Cables livianos de par trenzado que reducen la tensión de la muñeca para ecografistas que realizan múltiples ultrasonidos cada día.

- Cables finos de par trenzado que empaquetan más conectividad en dispositivos pequeños y livianos sin comprometer la funcionalidad. Esto permite a los proveedores de atención médica obtener imágenes de alta calidad y en tiempo real de los órganos de los pacientes durante cirugías mínimamente invasivas, como colocar dispositivos de control del ritmo o realizar terapias estructurales de válvulas cardíacas.

Los sensores están ayudando a impulsar los resultados en una nueva era de medicina basada en resultados, gracias a sus potentes microprocesadores y factores de forma cada vez más pequeños. Con afecciones médicas complejas y cirugías, las intervenciones anteriores generalmente conducen a los resultados más exitosos.

Los fabricantes deben trabajar estrechamente con los proveedores de atención médica para comprender las necesidades del mercado y el panorama regulatorio para poder abordar los requisitos críticos de salud y seguridad antes de que los productos puedan ser lanzados. Sin embargo, en una era en la que el talento, el tiempo y los recursos financieros de la salud se ven cada vez más limitados, los sensores tienen un papel poderoso que desempeñar para ayudar a los pacientes a administrar su propia salud y empoderar a los proveedores para que brinden una atención mejor y más escalable.

FUENTE TE Connectivity